Lo de comer por dos, olvidadlo, es triste ;-), pero es cierto, mito desterrado.
Nos recomiendan hacer 5 comidas al día y cenar pronto y ligero. Yo ya lo hacía así que no me ha costado acostumbrarme a esto, pero es ahora cuando empiezo a hacerlo sin naúseas, por fin!
Toma mucha agua, contribuye a una buena función renal. Debemos tomar 2,5 o 3 litros de agua, según el trimestre. El agua en el embarazo es fundamental para aumentar el volumen plasmático y mantener la cantidad de líquido amniótico y un correcto desarrollo fetal.
El ácido fólico imprescindible! Una pastillita al día durante el primer trimestre! Yo empecé a tomarla un par de meses antes de quedarme embarazada. Al ppio para prevenir la espina bífida y la cisura palatal y luego para prevenir el parto prematuro y el bajo peso del bebé.
Debemos evitar: las frituras, la bollería industrial, los alimentos precocinados…
Una de las cosas que siempre había leído que estaba prohibido era el sushi, mi ginecólogo dice que coma cuanto quiera, al bebé, me dice, no le puede pasar nada.
Lavar bien las verduras y comerlas crudas siempre que se pueda, es importante la piel por la fibra pero hay que lavarlas muy bien, yo estoy utilizando Amukina, por prevenir aún más.
No abuso ni del café ni del té, pero lo tomo siempre con azúcar moreno, ya que es mejor que el blanco o la sacarina.
Nutrientes que el bebé necesita:
Grasas: Son fuente de energía de primera clase y aseguran el buen funcionamiento del cuerpo, particularmente del sistema nervioso. Carnes, pescado, productos lácteos frescos y aceites vegetales.
Hidratos de carbono: Fuente de energía. Patatas, cereales y legumbres.
Vitaminas y minerales: esenciales para el crecimiento y desarrollo. La ingestión de productos frescos y completos proporcionan el mejor aporte de estos nutrimentos vitales, puesto que algunas vitaminas se encuentran en gran concentración bajo la piel de la fruta y las verduras, otras, especialmente la vitamina C, se destruye cuando se las somete a cocción o se las procesa.
Proteínas: Proporcionan los aminoácidos esenciales para la construcción de nuevos tejidos, así como para asegurar que las enzimas, las hormonas y anticuerpos funcionen de manera efectiva. Durante el embarazo necesitas más alimentos proteicos de lo normal, casi un 50%. Carnes, pescado, huevos, granos, frutos secos, lácteos.
Hierro: lentejas, mejillones, cereales, sardinas, frutas secas, (especialmente higos, albaricoques y ciruela), hojas verdes, levadura de cerveza, garbanzos, soja, almendras, piñones, acelgas, espinacas, alcachofas, escarola, berro, ternera, carne de cerdo, huevo, endivias, cordero, morcilla… Es normal que el médico te recete un complemento de hierro, a mí aún no me las ha recetado pero ya veremos. La vitamina C ayuda a fijar el hierro.
Yodo: bacalao, atún, salmón, mejillones, lenguado, marisco en general, piña, té, zanahorias y muchos más.
Magnesio: almendras, caracoles, soja en grano, cacahuete, pistacho, nueces, piñones, cacao en polvo, calamares, guisantes, chocolate amargo, arroz integral…
Calcio: sardinas, levadura de cerveza, leche de vaca, leche de cabra, leche de oveja, leche de soja enriquecida, calamares, gambas, zanahoria, judía verde, puerro, rábano, aceitunas, mandarinas, almendras, canónigos, dátiles, calabaza… entre otros….
Creo que no me dejo nada… todas estas cosas es mejor comerlas despacio y masticar bien para evitar los molestos ardores.
Cualquier cosa que me haya dejado me decís!
Feliz lunes!! 😉