La costra láctea del bebé es un trastorno muy frecuente en los lactantes. Suele aparecer después de las primeras semanas de vida y tiende a curarse espontáneamente en el plazo de un mes. No todos lo padecen pero es bastante habitual. aceitealmendras

En mi caso, yo empecé a ver como unas escamas en la cabecita de la peque pero pasado el mes, dicen que son amarillentas pero la verdad es que estas eran más bien blanquecinas, como caspa pero en forma de escamas.

El término técnico esdermatitis seborreica, pero a pesar del nombre que no cunda el pánico, no es grave y al bebé no le duele.

No se sabe con claridad qué provoca la aparición de la costra láctea, lo que está claro es que la lactancia materna no tiene nada que ver. Su aparición se atribuye al exceso de estimulación de las glándulas sebáceas del cuero cabelludo por parte de las hormonas maternas. De este modo, las glándulas producen una cantidad excesiva de sebo que, cuando entra en contacto con los microorganismos presentes en la superficie de la epidermis, genera escamas grasas, de un color amarillento y de un aspecto similar al de la cera.

Para que la  dermatitis seborreica no se extienda y vaya desapareciendo a mí me recomendaron: mustela-champu-costra-lactea-150-ml

1. Aplicar aceite de oliva o de almendra con un suave masaje para que penetre bien, solía hacerlo un par de veces al día, por la mañana y por la tarde.

2. Dejar durante un tiempo, si puede ser por la noche mejor que mejor.

3. Utilizar un champú que no reseque la piel.

4. Peinar al bebé con un cepillo suave en el sentido en el que crece el pelo.

Seguí estos consejos y para ello utilicé el aceite de almendras del Mercadona y vaselina líquida, que me recomendó el pediatra, y aunque al final no lo compré, me recomendaron el champú de Mustela. En dos-tres semanas la costra láctea había desaparecido.

Feliz día!!! 😉