No os descubro nada nuevo si os digo que los abuelos tienden a ser más permisivos que los padres y son incapaces de negarles un solo capricho a sus nietos. Hay quienes por este motivo tienen problemas con los abuelos, sobre todo con los suegros, por qué no decirlo…;-)
En mi caso, mi postura es esta: mis padres me impusieron normas, me educaron y me enseñaron todo lo que pudieron, además de darme todo lo que necesitaba y más, así que en mi caso y tras haber intentado que no se extralimitaran les dejo hacer absolutamente lo que les da la gana, tanto a los de un lado como a los del otro.
Ya os digo que eso de «En casa de los abuelos, pero con las normas de los padres» en nuestro caso no se cumple.
Pensaréis que soy una blanda pero me he cansado de decir: no le compréis chuches, gusanitos o lo que sea, no le hagáis regalos sino toca, no le pongáis la tv, no la dejéis saltar en el sofá, todo caía en saco roto.
Con lo único con lo que me ponía más seria era con el cumplimiento de las rutinas, pero aunque esto lo cumplen, sé que a veces le perdonan la siesta, aunque últimamente ya reconocen que «le viene bien» «luego está mejor» etc
Ah! También he tenido que recordar que hay ciertas cosas que la peque no debe comer porque a veces se les olvida…un día le dieron palomitas y no sé si alguna vez nueces o similar… en fin, esperemos no tener ningún susto.
Y me da igual como se lo diga, amable, borde, ellos van a hacer lo que quieran y punto.
CONCLUSIÓN:
Conozco a quienes se llevan muy malos ratos por tratar de imponer normas a los abuelos y la verdad es que yo creo que no merece la pena, es mi forma de verlo. Es más, creo que el amor no malcría, y l@s niñ@s que son más listos que el hambre, entienden «la permisividad» con la que actúan sus abuelos en el contexto del que proviene, y saben muy bien que cuando lleguen a casa el chollo se termina.
Un niñ@ no cambia sus hábitos alimenticios en un fin de semana, lo que yo suelo hacer es no darle en casa las cosas que sé que siempre le dan sus abuelos. De verdad, comer a deshoras tampoco no es el fin del mundo.
No voy a perder el tiempo con normas inflexibles que no los harán mejores ni peores personas. Si ven más tele con sus abuelos, si se gastan los euros en caballitos, etc adelante.
Quiero que mis hij@s sean agradecid@s, esto es muy importante para mí, y también creo que no tienen porqué dejar de serlo porque sus abuelos les compren cosas o les den caprichos. Yo siempre he tenido de todo y disfruto más regalando que recibiendo regalos. En vez de discutir con ellos, me centro en explicarles a los peques porqué debemos estar agradecid@s.
Intento que no les comparen, sobre todo porque la niña ya lo capta todo, pero se les olvida, esto me da rabia porque a veces no se dan cuenta que ciertas formas de decir las cosas que parecen inofensivas a la larga pueden perjudicarles, así que si estoy delante transformo esa frase y listo.
Ellos nos ayudan, están ahí cuando les necesitamos, son los primeros en aparecer si hay una urgencia y no se me ocurre nada a lo que no estuvieran dispuestos por sus nietos, así que he decidido colaborar con ellos porque las guerras no conducen a nada bueno, nunca.
Y vosotr@s qué pensáis? Estáis de acuerdo? Los abuelos os echan una mano? Son muy de «malcriar»? Contadme!!!! 😉
Yo también soy muy permisiva en ese sentido, a ver, que si tuviesen que hacerse cargos de mis hijos a diario, pues sí que intentaría que hubiese orden, pero tampoco puedes exigirles lo mismo que harías tú… Pero en mi caso, como soy yo la que cuido de ellos, los abuelos que disfruten y les consientan!
La verdad es que hay veces que ponerles límites es difícil, les damos la responsabilidad y luego encima exigimos. Yo opino igual pero ya sabes tú que ha de todo…a ver qué nos.cuenta la gente 😉 jejeje
En mi caso es por el gusto, y simplemente me limito a preguntar si esta bien… Me rendí
jajaja Entonces estás como yo, la palabra rendirse encaja muy bien!
Gracias por tu comentario
Los abuelos son así, les viene de serie. O te alias o discutes constantemente.
Un besote
Y pensar que algún día seremos así! jajajaja Qué gozada por otro lado!!!
Besazos reina
En casa de mis padres, las normas las ponen ellos, y me parece normal. Hay gente que se pasa la vida criticando a los abuelos, hasta que ellos son abuelos, y entonces se dedican a criticar a las nueras. Opino que ya que ellos se quedan con nuestros hijos, habrá que dejarlos (siempre dentro de la lógica) que elijan como, no?. Y a quien no le parezca bien, pues que se los quede en su casa… 😉
La verdad es que yo intenté poner alguna norma pero ya ves que sin resultado 😉 Es cierto que no hay que exigir tanto porque ayudan un montón.
Gracias por tu comentario!!!
Mi madre les deja hacer de todo, y comer….pues de todo también.Pero vamos con mi hermano y conmigo, mis padres han sido bastante permisivos y oye no hemos salido «mal» , ja,ja.Si que a veces le digo algo, pero es perder el tiempo.Sinceramente me sienta peor que mis suegros les den «chuches» o que les consientan algo que yo de normal no hago, a que lo haga mi madre,para que te voy a engañar!!Es que ha habido alguna cosa de mi suegra que me ha dolido y arrastro un poco el rencor….
jajajaja Así me gusta, sinceridad ante todo!!!!
Besazos!!! Encantada con tus comentarios 😉
Ahhh, ¿pero los abuelos tienen normas? jajaja 😉
Debe ser como las meigas… jajajaja
En mi caso sólo hay una norma estricta: si estamos todos juntos y su padre o yo les decimos algo a los niños, eso va a misa. Pero muy pocas veces les decimos algo cuando estan con los abuelos, nos gusta y disfrutamos de dejarles hacer su papel de consentidores y malcriadores, al fin es nuestra responsabilidad educarlos, no suya.
Eso está bien que los peques a las contradicciones les sacan mucho partido y luego se salen con la suya!
Besotes